Aparentemente, erigir una barda es la cosa más fácil del mundo, pero no es así. El hecho de que sea una de las tareas más “sencillas” de albañilería no significa que cualquiera lo pueda hacer.
Aunque se trate de una simple barda, debes proyectar desde un principio el futuro de la construcción, ya que si tu muro es sólo divisorio, significa que en el futuro no podrás unirlo a un techo, pues eso le agregaría carga y podría causar un desplome.
Cada propósito requiere una cimentación y construcción específica.
También debes tomar en cuenta el tipo de suelo. En lugares donde el terreno es muy arcilloso, no se tendrá el mismo resultado. Lo mejor es, en todos los casos, contratar a un albañil.
Si tu muro será alto, el cimiento debe ser más profundo; debe llevar castillos, zapatas, columnas, trabes, de acuerdo con su longitud. Una vez hecha la cimentación, debes proteger la cadena con impermeabilizante y cartón asfaltado, para que no tenga filtraciones de agua, pues eso acorta terriblemente su vida útil.
¿Has visto esas bardas caídas, o sostenidas con vigas? Fueron hechas por alguien sin experiencia que no tomó en cuenta que todo lo que tenga peso, debe ser asegurado de muchas maneras, desde cómo cimentar, qué materiales usar, etc. Además, depende de cómo hagas tu cimentación, tendrás un límite máximo de altura.
Si ya hiciste tu muro y quieres agregarle otros dos metros de altura, tendrás que volverla a hacer, o bien, complementarlos con malla, que de todos modos también debe cimentarse con tubos para que no la tumben los vientos.
¿Hacer una barda es fácil? |
Además de todo esto, tienes que saber plomear, es decir, nivelar los tabiques para que te queden bien derechitos, con ayuda, además, de las tiras de hilo. Por otro lado, la mezcla debe ir en la proporción correcta, para garantizar una adhesión duradera de los tabiques. Generalmente suelen ser cinco partes de arena (cribada) por dos de cal y una de cemento.
Como ves, son muchas las cosas en las que hay que pensar. Si algo te sale mal, podrías gastar más tiempo, dinero y esfuerzo, sin contar las lesiones físicas que podría provocarte la falta de experiencia.
Hay lugares que venden bardas prefabricadas, pero aún así, su instalación requiere de personal capacitado para ello.
Insistimos: mejor contrata a un albañil que sea cumplidor y que no te deje con la chamba tirada.
0 Comentarios